Un estudio reciente realizado por Autonomy, un grupo de expertos británico que se enfoca en el futuro del trabajo y la planificación económica, ha propuesto un cambio significativo en la forma en que trabajamos, gracias a la inteligencia artificial.
La investigación, titulada GPT-4 (Day Week), se centra en el Reino Unido y sugiere que con la implementación de la IA en los flujos de trabajo, una parte considerable de la fuerza laboral podría beneficiarse de una semana laboral de cuatro días manteniendo el mismo salario.
El estudio revela que aproximadamente 8,8 millones de trabajadores británicos, lo que representa el 28% de la fuerza laboral, podrían trabajar 32 horas a la semana, distribuidas en cuatro días, sin disminuir su productividad. Además, otros 27.9 millones de trabajadores en el país podrían ver una reducción de al menos un 10% en sus horas laborales. Estas cifras se basan en el aumento de productividad anual del 1.5% atribuido a la IA, estimado por Goldman Sachs. Autonomy propone dos escenarios: una reducción del 20% en las horas de trabajo manteniendo el mismo salario, y un aumento del 10% en la productividad, lo que permitiría una reducción del 10% en las horas de trabajo, también manteniendo el mismo salario.
Otro aspecto del estudio es la mejora del bienestar de los trabajadores. Menos estrés, mejor salud mental, y más tiempo para actividades personales y familiares son algunos de los beneficios potenciales de una semana laboral reducida. Por ejemplo, la implementación de asistentes de IA en entornos de oficina puede ahorrar tiempo en tareas como el análisis de datos, permitiendo a los empleados concentrarse en actividades más creativas y menos repetitivas.
En un contexto más amplio, el estudio de Autonomy también tiene implicaciones en países como Alemania y Estados Unidos. En Alemania, ya se está experimentando con la jornada laboral de cuatro días bajo el sistema 100-80-100, que implica mantener el 100% del salario de los empleados con una reducción del 80% en la jornada laboral y lograr un rendimiento del 100% en términos de productividad. En Estados Unidos, se estima que 35 millones de trabajadores podrían reducir su semana laboral a 32 horas para 2033, sin afectar su salario ni rendimiento.
Will Stronge, director de investigación de Autonomy, subraya que el despliegue de la tecnología en todo su potencial puede mejorar tanto las prácticas laborales como el equilibrio entre el trabajo y la vida personal. Además, destaca que la introducción de grandes modelos de lenguaje (LLM) como ChatGPT podría resultar en una reducción de al menos un 10% en las horas de trabajo para 28 millones de trabajadores británicos, representando el 88% de la fuerza laboral en el país.
Los estudios citados presentan una visión prometedora de cómo la IA podría transformar el mundo laboral, no solo en términos de eficiencia y productividad, sino también en mejorar la calidad de vida de los trabajadores. Sin embargo, la transición hacia este modelo laboral de cuatro días requiere una planificación cuidadosa, inversión y un enfoque ético que priorice el bienestar humano.
Jamie Dimon, CEO de JPMorgan, el banco más grande de Estados Unidos, ha compartido su visión optimista sobre el impacto de la inteligencia artificial (IA) en el futuro del trabajo. Contrario a las predicciones apocalípticas sobre la IA, Dimon ve un futuro en el que las dinámicas laborales se verán enormemente mejoradas, lo que ayudará a las personas a tener un mejor equilibrio entre su vida personal y laboral. Aunque tradicionalmente ha apoyado la norma de trabajar cinco días a la semana en la oficina, Dimon cree que las generaciones futuras de empleados podrían trabajar solo 3.5 días por semana debido al apoyo que la IA proporcionará para reducir la carga de trabajo. Esta perspectiva se opone a la de Goldman Sachs, que predice la pérdida de aproximadamente 300 millones de puestos de trabajo debido a la tecnología.
Dimon también sugiere que las nuevas tecnologías, incluida la IA, podrían llevar a que las nuevas generaciones alcancen los 100 años de edad, en gran parte debido a avances en la lucha contra enfermedades como el cáncer. Reconoce que, históricamente, la tecnología ha reemplazado puestos de trabajo, pero cree firmemente que la IA creará nuevos empleos y oportunidades. Además, menciona que la IA ya se utiliza en JPMorgan en áreas como detección de errores, investigación, operaciones e inversiones, y aunque su uso progresivo puede hacer que algunos trabajos sean redundantes, el banco se compromete a reubicar a las personas afectadas.
En una entrevista para Bloomberg, Dimon comentó que la IA está ayudando a eliminar algunas de las tareas más monótonas de la jornada laboral y que es probable que algunos empleos desaparezcan completamente debido a esta tecnología. Sin embargo, cree que la IA mejorará significativamente la calidad de vida de la próxima generación de trabajadores, permitiéndoles más tiempo libre y afectando todos los aspectos del flujo de trabajo en el sector financiero. Se compromete a que JPMorgan “recolocará” a cualquier persona cuyo empleo sea reemplazado por la IA.
Un estudio de la Universidad de Cambridge observó una reducción del 65% en los días de enfermedad en personas que tienen una semana laboral de cuatro días, y el 71% de los empleados dijeron que habían reducido los niveles de agotamiento. Esto sugiere que la reducción de la jornada laboral, facilitada por la IA, podría tener un impacto positivo en la salud mental y física de los trabajadores.
Reglamento-de-Inteligencia-Artificial-de-la-UE-vfCon información de: Genbeta, ComputerHoy, Mil21, ReasonWhy y Business Insider.
Artículo redactado con asistencia de diversas inteligencias artificiales generativas con supervisión humana (redacción AD).