En México, el 35% de las personas que han comprado en línea este año informan haber sido víctimas de ciberestafas, una preocupante realidad en la era digital. El auge de eventos de comercio electrónico como El Buen Fin, Black Friday y Cyber Monday, ha incrementado significativamente la cantidad de transacciones en línea, creando un terreno fértil para los cibercriminales. Los estafadores aprovechan estas temporadas de ofertas para multiplicar sus ataques, utilizando métodos como la venta ilegal de datos de tarjetas de crédito y otras formas de pago digitales en la dark web.
Los métodos de engaño empleados son variados y sofisticados. Un 42% de las víctimas reportan haber sido engañadas a través de redes sociales, mientras que un 40% cayeron mediante sitios web de terceros. Además, se utilizan métodos más tradicionales como llamadas telefónicas (25%), correos electrónicos (21%) y mensajes SMS (15%) para perpetrar estafas. Este escenario refleja la diversidad de canales que los ciberdelincuentes explotan para engañar a los consumidores.
El phishing, caracterizado por el envío de mensajes falsos con el objetivo de obtener información confidencial, ha aumentado en un 30% en México durante los primeros seis meses del año, convirtiéndose en el principal método de estafa en el comercio electrónico. Los delincuentes no solo buscan datos de los compradores, sino que también atacan a los distribuidores, lo que resalta la necesidad de que los comercios mantengan actualizados y en óptimo estado sus sistemas de seguridad.
La cifra de ciberataques en México es alarmante. Antes de la pandemia, se registraban aproximadamente 300.3 millones de intentos de ataques cibernéticos, pero para 2022, esta cifra se disparó a 187 mil millones, un aumento de más del 500%. México se ha convertido en el país más atacado de América Latina. Durante eventos como El Buen Fin, se espera un aumento en el número de ciberdelitos, principalmente porque los sistemas de pago se saturan y los compradores pueden cometer errores o caer en estafas.
La situación de la ciberseguridad en México muestra un contraste marcado entre las grandes marcas, que invierten significativamente en protegerse a sí mismos y a sus clientes, y las marcas más pequeñas que no cuentan con niveles adecuados de protección. Según Ciberimox, al menos 7 de cada 10 organizaciones en México han sido víctimas de algún ciberataque en los últimos 12 meses, en gran parte debido a la falta de inversión en ciberseguridad. Solo el 10% de las empresas en México tienen un nivel avanzado de ciberseguridad.
Ante este panorama, los expertos coinciden en que los usuarios deben ser cautelosos al realizar compras en línea, especialmente durante temporadas de ofertas y descuentos. Sin embargo, enfatizan que las empresas tienen la mayor responsabilidad de garantizar transacciones seguras para sus clientes. Esta dualidad en la carga de la responsabilidad subraya la importancia de una colaboración entre consumidores y empresas para combatir efectivamente el creciente problema de las ciberestafas.
Con información de: El Financiero y PressReader.
Artículo redactado con asistencia de diversas inteligencias artificiales generativas con supervisión humana (redacción AD).